Antón es el dueño de este local y una buena forma de hacerte con el carácter del gallego. En un primer acercamiento, Antón es parco en palabras, más bien seco. Pero te dará lo mejor que tiene y a un buen precio. Y si dejas que el tiempo le dé confianza, va a ser un gran descubrimiento. Entre lo mejor, sin duda, unos chuletones de ternera gallega insuperables y a un precio fantástico. Tiene un par de mesas al sol donde puedes compartir esos chuletones, entre el aire del Cebreiro y el sabor de la carne, vas a flipar.